Medialuna, plano de planta
La fachada de Medialuna es linda y la condición es que viva quien viva en ella tiene que ser de la familia y pintar las puertas, las ventanas y los pilares del corredor en azul. En mi época, la entrada principal era la puerta de la derecha, allí estaba la sala con la tele y los sofás donde yo veía Cosmos con mi papá las mañanas de los sábados. Y donde me tumbaba a tomarme el bibe (sí, hasta muy vieja tomé aguapanelita en mi "tetero toteado" de rosca negra y con tetina rota que mi mamá se negaba a cambiarme por motivos obvios), con mi cobija de peces, cuando entraba el sol. Algún día hablaré de mi cobija de peces. A la derecha de la sala de la tele estaba la "pieza" de mis papás, y, en galería, la de mi hermana y yo, donde está la otra puerta que daba al corredor. Después, también en galería pero dando ya la vuelta para formar el cuadrado de la planta de la casa, seguía "La Ropería", donde había un escritorio donde mi hermana hacía las tareas y donde me respondió la pregunta de qué es hacer el amor. De ahí , de frente, se pasaba a la "Pieza de Rut", mi linda tía Rut que cuando venía nos regalaba los lápices de ojos que ya no le cabían en el sacapuntas.
La Pieza de Rut daba, por su izquierda, a Medellín al fondo del valle, y a su derecha, al comedor, o a la sala de la chimenea, que en tiempos de mi papá había sido un patio al más puro estilo casa colonial. Tenía las baldosas rojas y negras, como las del corredor. Y al otro lado de aquel antiguo patio, estaba el baño y la cocina, completando el cuadrado, al que solo le faltaba, en su extremo izquierdo mirando como miraba Rut cuando se levantaba de la siesta, la última habitación de Medialuna: la Pieza de los Orillos.
Según la RAE orillo es, entre otras cosas el "rasgo horizontal que suelen llevar por adorno los trazos rectos de las letras", pero mis papás, muy dados en ponerle otros nombres a las cosas, se referirían a las orillas de los troncos, mejor dicho, a que la pieza de los orilllos estaba forrada de madera rústica rústica, casi que con la corteza del árbol. Junto a esta habitación había otra puerta que salía al Lavadero y al patio, y en el patio estaba El Instituto. Y debajo del Instituto estaba el Sótano 1 y debajo de la Pieza de Rut, el Sótano 2.
Medialuna era, en mis tiempos, pura fantasía, una casa repleta de casas para jugar mil cosas. En cada habitación tenía yo un mundo, y en los dos sótanos, en las chocitas que mi papá me montaba en la manga (césped) y debajo de los balazos (las plantas de hojas grandes que salen en la foto y que creo que aquí se llaman ostilla de adán), en la antigua casa del perro, camino de la quebrada, en la parte de las guaduas, en fin.
A mí de Medialuna me encantaba el suelo de madera sin las pijadas que se usan aquí, pero que resistía al tiempo. Y las paredes blancas, encaladas, con textura suave pero perfil sinuoso. Y el pasiajes, los atradecer desde Medialuna, Medellín atardeciendo, los arreboles rosados y rojos y amarillos, y las lucecitas de la ciudad, y la salida de la luna, y las estrellas que se veían, y los eucaliptos con el viento, las hojitas volando, y la música que sonaba y que le ponía banda sonora a mis juegos. Esa casita paisa da para mucho, y tal vez por eso es que le prometí a Nicolás y a Alicia, (pero no se lo he dicho, por si las moscas), que ya han estado allí, que algún día escribiría los "Cuentos de Medialuna", que no serían más que mis juegos escritos.
Por ahora, un plano de situación, una simple localización para mis películas de infancia.
En mis tiempos era así
Comentarios
Linda eres porque bello piensas...
De hecho lleguo a ser como un estado de animo.Por eso me hace gracia que tenga una planta real.Pero que conste que yo te creo,que ya,que ya se que existe.
Y sí, tienes que escribirle esos cuentos a tus niños.
Contrastes me ha robado el pensamiento¡¡
Pero bueno como si tuviera que defenderlo lo reitero pues.
ERES UNA ARTISTAZAAAA¡¡¡¡¡
Además tan buena en como lo rezumas, que me queda por menos decirte que enhorabuena por tu buen sentido de las cosas, de la vida, de todo....
suerte¡¡¡
Un saludo,
salud-saludos
un biquiño, "mija"