No es un lunes cualquiera
Suena The time we took, de Tindersticks, y una se inspira, porque lleva toda la tarde pensando que no había tema para el post del domingo. Oh! tremenda obligación moral actualizar al Cardhu. Cardhu: no quiero que te mueras. Y por eso te alimento de pendejadas.
Hace cuatro años cumplí treinta y fue como un antes y un después de mi vida. No me dí cuenta hasta pasados unos meses, pero todo empezó ahí. Cuando cumplí treinta, el 28 de abril dejó de sonar como siempre había sonado, porque, a pesar de haber nacido Nicolás en mayo del 2002, ya no era yo el centro de esa fecha. La razón: dos días antes había recibido mi regalo de cumpleaños: Alicia. Y, sonaba más bonito el 26. Con aquella bolita en los brazos, todos los que estaban a mi alrededor se olvidaron de mi cumpleaños, y fue curioso, porque a mi me dio más o menos igual. A estas alturas de la maternidad llego a la conclusión de que ha sido precisamente ella la que me ha hecho interiorizar, digamos, el día de mi cumple para sacarlo "de la vida mundana". Ahora es como si tuviera en mi cabeza el papelito de agenda diaria pintado en colorines, pero sólo en mi cabeza. Es un día en el que ya es tontería pedir mi comida preferida, que nadie me haga enfadar, que sea yo la reina del universo, para quedarme, mejor, como la Reina de mi Reino. Y suena más bonito, y sonrío, porque realmente una ya es mayor, y es ridículo esperar que todos los que estén a tu alrededor escuchen el 28 de abril con el sonido que lo escuchas tú, aunque para tí suene realmente bonito.
Hoy cumplo 34. Y he terminado el año 34 de mi vida hablando del amor. Más o menos de amor.Tres certezas tengo en este momento: una conversación de jueves y vino y un par de lágrimas, la cautela y el vértigo.
Y que soy feliz. Extrañamente feliz. Esa es el bonus track.
(Qué guays eran aquellas zapatillas...)
Comentarios
Aunque hoy inaugures tu año 35 (trigésimo quinto suena demasiado impresionante) sigues teniendo ese halo veinteañero, el cual me temo que te acompañará por tiempo indefinido.
Suerte que eran sólo 3 certezas, por cierto...
pd: esa especie de lince-guepardo que aparece detrás de Miss Popularidad 1982, ¿es autóctono de Colombia?
Ese aire veintañero... no sé, será que el mundo zapatillas me sigue gustando...Fetichismos. En fin.
Miss Popularidad... jejeje
qué mejor día para romper el hielo que hoy. Yo también hace semanas que sigo tus andanzas por aqui,y leerte es como ir acercando una cucharilla de miel a los labios, sientes el aroma antes de saborearla. Un doble sentido.
Piensa que esta fecha suena todavía muy bien para muchos que cada día coloreamos la agenda aunque la vida quiera arrancarle algunas hojas. Y ahí lo mejor es cogerla y planear esa huida...
Que tengas un buen día por los prados!
Joan.
FELIZ CUMPLEAÑOS PI¡¡¡¡¡¡
(coño se me han adelantado)
Pero antes de irme a dormir, te deseo lo mejor de ésta vida;
eres un año menor que yo. Y piensas lo mismo que yo. O yo pienso lo mismo que tu.
Lo que es cierto, es que ser madres nos ha brindado un control de sí mismas que el balance de nuestro tiempo, ya echará sus raíces blindadas en el tiempo pasado, cuándo se empezaba a cubrir las páginas de nuestros recuerdos en dibujitos de propuestas mágicas.
¿Recuerdas esa sensación?
Éramos tan niñas.
De todas formas Pi, eres un encanto de chiquilla¡¡¡
Se feliz¡¡
Y cómo hemos cambiado... Te leo madura y tan reflexiva... Aunque, menos mal, te conozco, y en cualquier momento te lías la manta de los arrebatos juveniles a la cabeza, coges tu Pickup y tiras para el monte, como buena cabra que eres.
Un año más, feliidades, baby mía.
suena genial.
que suene,
que suene tan linda esa existecia que brindas,
eres la reina de este rinconcito,
la reina de tu vida,
la reina de tu reino.
(no lo olvides, cielo)
un besazoooo!!
salud-saludos
Te felicito por tu cumpleaños, amiga.
La juventud venimos arrasando...
34 mil besos
Antes me he dado una vuelta por tus escritos, me gustan son frescos y tienen un punto de ironía salvaje.
Cumplimos el mismo mes, pero yo ya lo hice y fueron muchos más, 54.
Me siento llena de energía, lo peor que te haces viejita, las arrugas, luchar con el sobrepeso...
Lo mejor, que ya no tienes que demostrar nada, que al fin sabes lo que quieres y sobre todo lo que no quieres y sólo te quedas con lo que vale de verdad.
Es mi mejor momento. Por primera vez dispongo de tiempo para mí.
No hay crisis que valgan sólo etapas y hay que empezar cada uno de ellas con intensidad.
Besos, Pi y ¡Felicidades!
felicidades ;)
Me alegro por tí.
Muchas felicidades.